
Título: Mestiza
Título original: Half-Blood
Saga: Covenant (Covenant)
1. Mestiza
2. Pura
3. Deidad
4. Apollyon
5. Sentinel
Autor/a: Jennifer L. Armentrout
Editorial: Ediciones Kiwi
Fecha de publicación: 21 de junio de 2013
Nº de páginas: 350
Sinopsis:
Los Hematoi provienen de la unión entre dioses y mortales; y los hijos de dos Hematois de sangre pura tienen poderes divinos. En cambio, los hijos de Hematois y mortales, no. Los mestizos solo tienen dos opciones: entrenar para ser centinelas, cazando y matando Daimons, o convertirse en sirvientes de las casas de los puros. Alexandria prefiere arriesgar su vida luchando antes que limpiar retretes, aunque de todas formas, puede que termine en los barrios bajos.
Hay reglas muy estrictas que los estudiantes del Covenant deben seguir. Álex tiene problemas con todas, pero especialmente con la regla número 1: «Las relaciones entre pura sangre y mestizos están prohibidas».
Por desgracia, Álex se siente atraída por Aiden, un pura sangre irresistible. Aunque enamorarse de Aiden no es su mayor problema; mantenerse viva hasta su graduación en el Covenant y llegar a ser centinela sí lo es. Si no cumple con su deber, se enfrentará a un futuro peor que la muerte o la esclavitud: se convertirá en un Daimon y Aiden será su cazador. Y eso, no es nada bueno.
Hay reglas muy estrictas que los estudiantes del Covenant deben seguir. Álex tiene problemas con todas, pero especialmente con la regla número 1: «Las relaciones entre pura sangre y mestizos están prohibidas».
Por desgracia, Álex se siente atraída por Aiden, un pura sangre irresistible. Aunque enamorarse de Aiden no es su mayor problema; mantenerse viva hasta su graduación en el Covenant y llegar a ser centinela sí lo es. Si no cumple con su deber, se enfrentará a un futuro peor que la muerte o la esclavitud: se convertirá en un Daimon y Aiden será su cazador. Y eso, no es nada bueno.
Valoración Personal:
Álex lleva tres años en paradero desconocido. Un día, su madre hizo las maletas y las dos juntas se marcharon del instituto para Hematois purasangres y mestizos, el Covenant. Así de simple. Ella nunca le dijo a Álex el porqué de su partida, y ésta no se cuestiona las decisiones que ha tomado su madre hasta que ocurre lo inevitable: unos Daimons (purasangre convertidos en una especie de zombies con poderes) las atacan y asesinan a su madre.
Es entonces cuando aparecen (a buenas horas, mangas verdes) los Centinelas mandados por el Covenant a rescatar a Álex. Y qué casualidad que quien corra en su ayuda sea nada más ni nada menos que Aiden, eltío buenorro chico del que Álex se enamoró durante su estancia en la escuela.
Álex no da muchas vueltas a lo que ocurre entre los dos, pero cuando vuelve al Covenant, se da cuenta de que todo ha cambiado. Su tío es ahora el director de la escuela y no le interesa que Álex retorne al Covenant, pues lleva tres años de retraso en entrenamientos. Lo único que la salva es que Aiden meta baza y se ofrezca para prepararla durante el verano. Claro está, si Álex fuera una adolescente normal en vez de una mestiza, estar durante la mitad del día con el tío que le mola sería un paso hacia la gloria. ¿Problema? Aiden es un puro, y por lo tanto, una fruta prohibida para las papilas gustativas de Álex. ¿Y qué pasa con Álex? Lo que le han dicho que no puede tener es lo que ahora más va a querer.
Así que aquí empieza el dilema, blah blah blah, misterio, blah blah blah se reúne de nuevo con sus amigos, blah blah blah...bueno, me entendéis. Vayamos al grano:
Érase una trama tan típica, tan típica... que me hizo preguntarme si esta autora sólo escribe americanadas para fastidiar al personal.
Exactamente, señoras y señores. Lo que nos encontramos aquí, en el mismísimo Covenant, es un instituto americano que cuenta con magia yzombies Daimons acechando. Está la jerarquía, pero en vez de contar con los quarterbacks y las animadoras en la cúspide de la pirámide, vemos a los Hematois/sagrepuras, y en la base, pues, en lugar del diverso popurrí de marginados y raritos de las películas estadounidense, podemos observar a los mestizos.
Ahora, diseccionemos más profundamente.
Dentro de los puros hay dos tipos de personajes. Llamémoslos Prototipo A y B, respectivamente, por ahora.
Prototipo A. También conocido como el "Chupóptero de Cuentas Corrientes". Aquel niño bien que no produce ingreso alguno en la familia pero es excedentario en fajos de billetes gracias a las riquezas de papá/mamá.
Prototipo B. Alias, "Bad Boy/Girl". Aquel niño (también rico) que se pasa el día de "party hard", como lo llamarían ellos, y cuya meta en la vida es pasar el limbo y beber hasta no poder más. Lema: lo hago porque YOLO, but first lemme take a selfie.
Y es que, tras observar a estos especímenes, cómo no se va a enamorar la protagonista de Aiden, un tipo centrado y completamente normal, pero con esa pizca de vulnerabilidad que tanto vuelve loca por América.
Y luego están los mestizos... qué, bueno, en resumen... también van mucho de party hard, pero no tienen tanto presupuesto, básicamente.
Érase una trama que profundizó tan poco, tan poco... que podría haber adivinado el final sin utilizar poderes divinos.
Cuando yo leo un libro con muchos detalles, me gusta tomarme mi tiempo para leer. Me encanta meterme en la historia y conocer bien a los personajes. Asimilar cada uno de los misterios y sentir como se hilan alrededor de la historia. ¿Y qué ha pasado con este libro? La trama es tan amena y profundiza tan poco que la historia se hace muy previsible. Ya os digo, Álex no hacía más que descubrir cosas obvias para mí, y que no hacían más que ralentizar la narración.
En cuanto a la pluma de la historia... era lo que me esperaba. Jennifer L. Armentrout es muy divertida, y creo que por eso gana puntos. Sus protagonistas suelen tener mucho carácter, y eso las hace muy propensas al sarcasmo y las contestaciones mordaces.
Mi valoración:
¿Lo habéis leído? ¿Qué os pareció a vosotros?
Es entonces cuando aparecen (a buenas horas, mangas verdes) los Centinelas mandados por el Covenant a rescatar a Álex. Y qué casualidad que quien corra en su ayuda sea nada más ni nada menos que Aiden, el
Álex no da muchas vueltas a lo que ocurre entre los dos, pero cuando vuelve al Covenant, se da cuenta de que todo ha cambiado. Su tío es ahora el director de la escuela y no le interesa que Álex retorne al Covenant, pues lleva tres años de retraso en entrenamientos. Lo único que la salva es que Aiden meta baza y se ofrezca para prepararla durante el verano. Claro está, si Álex fuera una adolescente normal en vez de una mestiza, estar durante la mitad del día con el tío que le mola sería un paso hacia la gloria. ¿Problema? Aiden es un puro, y por lo tanto, una fruta prohibida para las papilas gustativas de Álex. ¿Y qué pasa con Álex? Lo que le han dicho que no puede tener es lo que ahora más va a querer.
Así que aquí empieza el dilema, blah blah blah, misterio, blah blah blah se reúne de nuevo con sus amigos, blah blah blah...bueno, me entendéis. Vayamos al grano:
Érase una trama tan típica, tan típica... que me hizo preguntarme si esta autora sólo escribe americanadas para fastidiar al personal.
Exactamente, señoras y señores. Lo que nos encontramos aquí, en el mismísimo Covenant, es un instituto americano que cuenta con magia y
Ahora, diseccionemos más profundamente.
Dentro de los puros hay dos tipos de personajes. Llamémoslos Prototipo A y B, respectivamente, por ahora.
Prototipo A. También conocido como el "Chupóptero de Cuentas Corrientes". Aquel niño bien que no produce ingreso alguno en la familia pero es excedentario en fajos de billetes gracias a las riquezas de papá/mamá.
Prototipo B. Alias, "Bad Boy/Girl". Aquel niño (también rico) que se pasa el día de "party hard", como lo llamarían ellos, y cuya meta en la vida es pasar el limbo y beber hasta no poder más. Lema: lo hago porque YOLO, but first lemme take a selfie.
Y es que, tras observar a estos especímenes, cómo no se va a enamorar la protagonista de Aiden, un tipo centrado y completamente normal, pero con esa pizca de vulnerabilidad que tanto vuelve loca por América.
Y luego están los mestizos... qué, bueno, en resumen... también van mucho de party hard, pero no tienen tanto presupuesto, básicamente.
Érase una trama que profundizó tan poco, tan poco... que podría haber adivinado el final sin utilizar poderes divinos.
Cuando yo leo un libro con muchos detalles, me gusta tomarme mi tiempo para leer. Me encanta meterme en la historia y conocer bien a los personajes. Asimilar cada uno de los misterios y sentir como se hilan alrededor de la historia. ¿Y qué ha pasado con este libro? La trama es tan amena y profundiza tan poco que la historia se hace muy previsible. Ya os digo, Álex no hacía más que descubrir cosas obvias para mí, y que no hacían más que ralentizar la narración.
En cuanto a la pluma de la historia... era lo que me esperaba. Jennifer L. Armentrout es muy divertida, y creo que por eso gana puntos. Sus protagonistas suelen tener mucho carácter, y eso las hace muy propensas al sarcasmo y las contestaciones mordaces.
Y aunque ellas me suelen gustar, esta vez no he sabido conectar con la protagonista. Álex es muy fuerte, pero a la vez es una chica problemática y muy propensa a llegar a las manos cuando el asunto se desboca... lo que me ha resultado una actitud un poco... eh... Vamos, me ha parecido un poco matona, no hay forma de esconderlo.
Ella y Aiden son los únicos personajes que llegamos a conocer del todo, y su romance no ha estado mal, sobre todo porque se cuece a fuego lento, como prefiero yo. Eso sí, no le voy a perdonar a la autora que haya metido a un tercero en discordia, porque en mi opinión la historia, a pesar de todo, no da para un triángulo amoroso, sinceramente.
Y... ya está. Una historia muy, muuuuuuy previsible que supongo que os gustará si la autora es de vuestro agrado pero que no es nada del otro mundo y que no hace más que poblar nuestro mundo de otra americanada más. ¿Que buscáis un libro que os entretenga una tarde de domingo? Este es vuestra novela. ¿Que buscáis una historia absorbente y misteriosa? Volved a la librería.
Mi valoración:
¿Lo habéis leído? ¿Qué os pareció a vosotros?